CREENCIAS Y PARADIGMAS

Las creencias son la suma de los preconceptos que tenemos sobre nuestra realidad. Es un concepto previo que tenemos de algo, la palabra ya lo dice. De nuestros preconceptos pueden surgir nuestros prejuicios y ambos, preconcepto y prejuicio son partes de las ideas preconcebidas.

Lo anterior quiere decir que tenemos ideas formadas en nuestra mente que son anteriores a la experiencia mas amplia de un fenómeno o situación.

En otras palabras, cuando nos formamos una opinión o concluimos algo, y esa opinión/conclusión es rígida, estamos en presencia de un prejuicio, enjuiciamos a algo o alguien, antes de tener una amplia cantidad de información sobre el asunto.

Cuando hablamos de un preconcepto es algo menos rígido, con más apertura a conocer el fenómeno en cuestión, pero sirve como punto de partida.

El preconcepto puede transformarse en prejuicio si perdemos esa apertura de mente frente al fenómeno.

Y aquí viene lo interesante:

Nunca hay que perder esa apertura de mente ya que nunca seremos capaces de tener TODA la información sobre un determinado asunto, al menos desde los cuerpos inferiores.

Esto no significa que tengamos que vivir pensando que nada importa porque no somos capaces de entender la realidad, simplemente estoy diciendo que, si vemos la realidad solo desde el plano mental/emocional, jamás veremos el “cuadro general”.

Volvamos a las creencias y paradigmas:

Ya establecimos que las creencias se componen de preconceptos (ideas preestablecidas que sirven de punto de partida para el aprendizaje ya que no son tan rígidas) y prejuicios (ideas preestablecidas rígidas que concluyen o generan un juicio, una conclusión desinformada).

Los paradigmas son un conjunto de creencias que forman una “forma de pensar” respecto de algún tema o incluso una forma de pensar sobre la vída en general.

Po ejemplo cuando decimos que la vida es difícil, injusta, dura, hermosa etc…

Cada una de esas frases parte con una preconcepción de la vida, la sumatoria de esas preconcepciones genera una creencia y cuando esas creencias se traducen en una visión del mundo, ese es nuestro paradigma sobre la vida, la sociedad, el concepto de familia o cualquier otra cosa.

Pero: ¿de dónde vienen esos preconceptos, paradigmas y creencias?

 Ellos se construyen principalmente con 4 cosas:

  1. NUESTRAS EXPERIENCIAS
  2. IDEAS IMPLANTADAS, estas pueden tener su origen en la familia, la cultura o sociedad.
  3. IDEAS HEREDADAS
  4. LA NATURALEZA

Cuando somos niños nuestro desarrollo se produce de los cuerpos inferiores a los cuerpos superiores, vamos creciendo como la semilla de un árbol, de abajo hacia arriba, siendo direccionados por una inteligencia a la que podemos llamar NATURALEZA, la que puso en movimiento una serie de procesos y leyes que permiten ese desarrollo.

Estamos cargados de instintos de sobrevivencia, información en nuestro ADN, y una serie de circuitos mentales que se van desarrollando naturalmente en nosotros. Muchos de ellos relacionados con nuestros sesgos cognitivos, jerarquía de valores, instinto gregario y un largo etc…

Todos ellos para asegurar nuestra sobrevivencia y facilitar nuestra toma de decisiones. NO PARA HACERNOS MÁS FELICES Y PLENOS

Es importante estudiar estos conceptos para conocernos más a nosotros mismos, no para descubrir e identificar los sesgos y paradigmas de los demás, cada uno esta en su viaje de autoconocimiento y solo podemos convertirnos en soberano de nuestra propia vida, no de la de los demás.

Por otro lado, están nuestras IDEAS HEREDADAS, con esto me refiero a los paradigmas y creencias familiares que son introyectadas en nosotros principalmente a nivel inconsciente y subconsciente. Heredamos la forma de ser de nuestros abuelos, bisabuelos y tatarabuelos, si ellos tenían traumas y paradigmas fuertes, estos son heredados hasta la cuarta o quinta generación, si es que son trabajados. Si es que continuamos con esos paradigmas, ellos pueden durar aún más.

Podemos hacer más consciente estas ideas heredadas al prestar atención a nuestros antepasados, conversar con ellos, tratar de entenderlos, de dónde vienen, cuál era la cultura que los moldeó, para qué tomaron las decisiones que tomaron etc…, luego, ver si esas conductas y respuestas automáticas de ellos están en nosotros.

Muchas veces se dice que heredamos el temperamento de algún antepasado, si es tu caso observa cuando ese temperamento se manifieste y pregúntate si es la manera en que quieres reaccionar, al poco tiempo podrás modificar esa conducta si es lo que deseas.

Por supuesto que existen traumas y situaciones familiares heredadas que son muy complejas de resolver, algunas requieren terapia, sin embargo, como este libro no trata de terapia, vamos a continuar con el siguiente asunto.

Las IDEAS IMPLANTADAS, llamo a estas implantadas porque vienen principalmente de afuera hacia adentro, es decir, lo que nuestros padres y cercanos nos reforzaron por medio de la comunicación, verbal y no verbal, cuando estábamos en etapa de desarrollo.

Esto incluye por supuesto las ideas de nuestra sociedad, la religión, sea organizada o no, los grupos sociales a los que somos afines, la ideología política y un largo etc…

Crecimos en un mundo que ya estaba conformado y constituido por una serie de paradigmas reforzados constantemente.

Esto cala tan profundo en nuestro ser que determina la forma en que nos vestimos, nuestra concepción del bien y el mal, lo que podemos tolerar y lo que nos produce malestar, la frecuencia con la cual nos lavamos los dientes, nuestro nivel de higiene, los temas de conversación que nos gustan y nos disgustan etc…

Es una de las fuerzas de cohesión social más importantes ya que conforman los cimientos de cualquier cultura.

No todas las culturas fueron creadas iguales, hay culturas rígidas que privilegian relaciones de dominación y de restricción a la individualidad en beneficio del grupo, otras culturas que privilegian la libertad y el desarrollo personal por sobre los intereses del colectivo, otras están llenas de rituales y son extremadamente religiosas, otras cultivan la relación con la naturaleza y los procesos de la vida.

Los grupos humanos y la familia se alinean con la cultura cuando esta esta cohesionada, y son más diversas cuando la cultura no es tan cohesionada.

Sin embargo, estas dos fuerzas generan un impacto tremendo en nuestra visión del mundo.

Una forma de ser más conscientes de este fenómeno es estar atentos a la fuerza emocional con la que reaccionamos ante estas ideas implantadas.

Voy a contarte un ejemplo de mi propia vida:

Mi padre es una de las personas mas disciplinadas que conozco, se levantaba religiosamente a las 6am y trabajaba hasta las 11pm, tiene un gran sentido de vocación y cuando crecí era muy apegado a las normas de una sociedad tradicional.

Nacer, educarse, estudiar, ir a misa, trabajar duro para tener una buena vida financiera, casarse, tener hijos y formar una familia estable y con buenos valores, eran cosas fundamentales para él, al menos en mi interpretación de lo que era mi padre (recordemos que todo es cuestión de interpretación también)

Esas ideas mi padre intentó implantármelas desde pequeño y yo, en mi espíritu rebelde moderado, las rechace, terminé la universidad y me fui a viajar por el mundo, abandoné la carrera de abogado y me dediqué al DeRose Method que era mi pasión, no tengo mujer ni hijos.

Todo lo anterior era bastante alejado del proyecto de vida que se me quería implantar.

Sin embargo, percibí algo muy interesante, que conocía por las diversas lecturas que ya entonces tenía, y es que tanto el apego hacia cierto paradigma como el rechazo fuerte a este son reacciones y no decisiones conscientes.

Cuando me fui de viaje después de la universidad, una de las razones de emprender esa aventura, fue la reacción frente a las ideas que, en mi interpretación, me estaba implantando mi padre.

Lo que me interesa que comprendas, querido lector, es que si estas reaccionando a algo, sea por apego o distanciamiento, no estás actuando libremente con respecto a esa idea, estás actuando desde el miedo. Miedo a como sería la vida sin ese paradigma y miedo a lo que sería la vida viviendo ese paradigma.

Es por eso que es muy importante ser consciente de tus reacciones emocionales respecto a cualquier idea, paradigma, ideología y concepción del mundo ya que ellas te dirán si estás reaccionando o decidiendo con libertad.

Finalmente, nuestras EXPERIENCIAS, ellas nos hacen concluir que el mundo es de la manera en que lo experimentamos y eso crea paradigmas.

Por ejemplo, si te rompen el corazón porque te fueron infiel muchas veces, la conclusión es que todos los del sexo opuesto son iguales, se genera un paradigma.

Sin embargo, la realidad es mucho más amplia, hay parejas que son muy felices y nunca han sido infieles, hay parejas que tienen relaciones abiertas, hay parejas que ni siquiera viven juntas, existen infinitas configuraciones de relaciones afectivas.

Si lo anterior te produce rechazo es porque estás reaccionando en base a un paradigma, si tienes la sensación de que hay que destruir la forma en que la sociedad propone relacionarse y aceptaste rápidamente lo que mencioné en el párrafo anterior, también estás reaccionando.

La propuesta de este libro es darte herramientas que te permitan conocerte más para que sepas cuales son las cosas que resuenan contigo y desde ese lugar ser más consciente y tomar las mejores decisiones para TÚ VIDA.

Somo seres condicionados, llenos de creencias y paradigmas, algunas de ellas nos limitan otras nos expanden.

Por ejemplo si crees que nunca serás millonario, nunca lo serás y punto, no hay nada que hacer, lo mismo ocurre si crees que la vida es difícil, si estas resentido porque algunas personas nacieron con mejor situación etc…

Son todas creencias, en este caso limitantes, el hecho esta en que muchas personas nacieron sin nada y se hicieron millonarias, ¿porque no tú si es lo que quieres? Si bien la vida tiene sus dificultades, también te entrega infinitas posibilidades ¿Por qué no buscar las oportunidades en vez de paralizarse por las dificultades? Y es verdad que hay personas que están en una mejor situación, pero también es verdad que hay más personas que están en una peor situación que la tuya, entonces ¿porqué no ser agradecido en vez de resentido?

Todo es una cuestión de interpretación, de punto de vista, no dejes que tus creencias y paradigmas determinen tu futuro, toma las riendas de tu vida y construye lo que tu quieras con ella, una vida inspiradora, motivadora, que aporte al mundo, que te llene de felicidad y que cuando te acerques al día de tu muerte puedas mirar hacia atrás sintiéndote orgulloso de que gracias a que pasaste por este mundo la vida de millones de personas es mejor.

Por: Juan Celedón